Una reducción por entre el 15 y el 20 por ciento en la productividad del cultivo de maíz en grano experimentó Morelia en 2023, de acuerdo con Jorge Calderón, titular del departamento de Agricultura, de la Secretaría de Desarrollo Rural y Medio Ambiente.
Detalló que la baja captación de lluvias observada este año representó el 54 por ciento de la media histórica para Morelia, lo que propició que “no se llenaran las mazorcas”, con lo que se disminuyó la productividad de los cultivos de maíz en grano.
En el municipio se estima que existen de 19 mil a 20 mil hectáreas dedicadas a la agricultura, de las que 16 mil se dedican a la obtención del maíz en grano.
La mayor parte de la producción de maíz en grano depende de las lluvias, al ser cultivado en tierras de temporal, ya que la tecnificación del riego es aún minoritaria, con dos mil a dos mil 500 hectáreas.
La insuficiencia de lluvias en Morelia no afectó a la producción de maíz forrajero, ya que este cultivo se destina a la obtención de alimento para el ganado, mencionó.
Agregó que un diagnóstico en Morelia está en marcha para determinar el alcance de los efectos adversos de la insuficiencia de lluvias, que se vivió este año y se prevé para 2024.
Actualmente, no se considera que Morelia enfrenta una contingencia derivada de la sequía, aunque sí se han encontrado áreas donde se registra estrés hídrico.
Respecto de la declaración de contingencia efectuada por el estado, a causa de la insuficiencia de lluvias en Michoacán, no se tienen acercamientos ni conocimiento sobre las implicaciones para el municipio.
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